Como bien ha dicho Agustín, los guantes de fútbol son una herramienta de trabajo fundamental para todos los porteros.
Sin duda alguna cada uno tiene sus propias preferencias, marcas favoritas, tipos de agarre...
Hace algunos años era casi imposible encontrar un guante "bueno" sin tener que gastarse mucho dinero y sin ir hasta la última tienda posible donde poderlos encontrar, hoy en día eso ha cambiado sobre todo gracias a la tecnología. Por internet se pueden encontrar multitud de materiales especializados en el portero a buen precio y con una calidad tan buena como la de los porteros profesionales.
La mayoría de los porteros no saldrían a jugar sin sus guantes, ya que estos son su tesoro más valuoso. Pero si echamos la vista atrás encontramos un caso muy curioso relacionado con esta prenda.
Ricardo, portero de la selección de Portugal de fútbol se convirtió en ídolo en su país después de haber parado varios penaltis sin sus guantes, que le sirvieron a su selección clasificarse para la final de la copa de europa. Este hecho se produjo cuando después de no haber estado acertado durante los dos primeros lanzamientos decidió desprenderse de estos para que su suerte cambiara y así fue.
Los porteros profesionales de aquel momento explicaban así lo ocurrido:
Cañizares (Valencia y selección española)
Yo nunca lo habría hecho, pero cada portero tiene su manera de afrontar las situaciones. Yo no puedo vivir sin mis guantes. Los guantes forman parte de mi cuerpo, tengo con ellos una relación muy especial. Sin ellos me siento como desnudo.
La verdad es que sí me sorprendió mucho verle sin guantes en el penalti. Yo le debo tanto a mis guantes que no me veo sin ellos. En cualquier caso, creo que fue más superstición que otra cosa y que se los quitó para cambiar la racha y porque en ese momento pensó que era lo mejor.
Iker Casillas (Real Madrid y selección española).
Es curioso que a Ricardo le consideren hoy como rey de la Eurocopa cuando hace unas semanas le estaban criticando y defendían a Vítor Baía. Siempre ha estado Ricardo a la sombra de Baía y ahora ha llegado su momento. Se demuestra que si dan oportunidad a la gente, al final llega su día. Y no hay que precipitarse en los comentarios. Si se quitó los guantes e hizo lo que le salió en ese momento, sólo él sabe por qué lo hizo. Le salió bien que es lo que cuenta.
- José Manuel Reina (Villarreal e internacional sub '21) A todos nos llamó la atención. Pero consiguió su objetivo. En mi opinión, se quitó los guantes para romper el gafe que tenía hasta ese momento. Todos los penaltis habían ido dentro y sin ellos le llegó la gloria.
Quiso llamar la atención, se le veía enfadado y logró su objetivo que era lo importante para Portugal. Se le ve en la tele como cuando para el penalti los mira y dice algo así como 'ves, sin ellos he tenido suerte o algo así'.
José Manuel Otxotorena (Preparador de porteros del Valencia y de la selección española).
- Fue un detalle llamativo, inusual en un portero. Pero son momentos, instantes que pasan. Se veía que no estaba acertado, todos los penaltis le habían ido al centro y habían entrado. Salvo el de Beckham que se fue arriba.
Fue una mezcla de superstición e intuición. Estaba desesperado, veía que no estaba adivinando los lanzamientos, se le pasó por la cabeza prescindir de los guantes y cambió la racha.
Hay que tener en cuenta que en ese lanzamiento no es importante pararlo, vale con despejarlo. Sin embargo, el valor del guante siempre es indiscutible. Con guantes paras mejor los balones resbaladizos. El manejó todos los parámetros y salió airoso.
Andoni Zubizarreta (Ex portero internacional del Athletic de Bilbao. Director general del Athletic en la actualidad).
- Yo nunca lo había visto en mi vida. Un portero sin guantes es la primera vez que lo veo en un campo profesional. Depende de la tensión que viviera en ese momento, en cualquier caso sólo él sabe porque optó por esa actitud. Pero vamos, da la impresión que quiso probar algo nuevo para cambiar el destino.
Toni Jiménez Sistachs (Portero internacional del RCD Espanyol, campeón olímpico).
- Se le veía a Ricardo muy cabreado, enfadado, enrabietado. Todos los penaltis le habían ido por el centro. Así que tiró por ese lado, el de prescindir de los guantes. De todas formas, en ese tipo de jugadas, sólo hay que rechazar el balón.
* datos extraidos de www.terra.com
